Cuando su madre y su padre decidieron poner fin a su matrimonio, Marco, tenía 10 años, y aunque al principio fue duro para él, con el tiempo ha conseguido superarlo. No fue fácil, llevo tiempo, esfuerzo y dedicación. Su psicóloga, siempre lo tuvo claro, Marco es valiente, inteligente y sensible, y no le costará entender que un divorcio es algo natural a lo que se enfrentan diariamente millones de familias en todo el mundo y que no tiene porque resultar una experiencia traumática. Simplemente, hay que hablar con l@s peques, explicarles las cosas, y sobre todo, hacerles entender que la cosa no tiene que ver nada con ell@s.
Muchos hijos e hijas de padres divorciados, viven la experiencia como si de una pérdida o un fallecimiento se tratase, incluso peor, experimentando todas y cada una de las etapas del duelo: negociación, depresión, ira, negociación y aceptación. Ante esto, los y las profesionales recomiendan calma, atención y mucho diálogo. Conversar con los hij@s, sincerarse con ell@s, interesarse por lo que les preocupa… todo esto es vital, para que el niño o la niña terminen por aceptar la situación con la mayor normalidad posible.
En el caso de Marco, el asunto se complicó un poco ya que su padre (que en realidad no era su padre biológico pero sí la persona que lo había cuidado y querido desde pequeño como tal), no actuó de forma prudente en un principio. La impotencia ante la imposibilidad de una reconciliación provocó que el divorcio no fuera tan amistoso como en principio tenían previsto, por lo que fue necesario contratar a un abogado experto en divorcios, TFS abogados en Santander, es el despacho que se ocupó de su tema. Afortunadamente todo salió muy bien, ya que en tfs, cuentan con un equipo de abogados involucrados completamente en cada caso, que lucha con pasión por los intereses de sus clientes, y que nunca se rinden. Este despacho de abogados trabaja tanto con particulares, como empresas o autónomos, y siempre con una total dedicación, como si de algo personal se tratase, ofreciendo en cada caso, las mejores estrategias y soluciones legales.
Algunas pautas que ayudarán a los niños y niñas a manejar la situación
El divorcio supone una experiencia traumática para todos los miembros de la familia, y en especial para los niños y niñas, pero siempre hay formas de hacer que resulte más llevadero, que se comprenda y se llegue a aceptar con el tiempo. Te vamos a dar algunas pautas de comportamiento que ayudarán, en caso de divorcio, a que tus pequeñ@s lo viven de la mejor forma posible, evitando en todo momento que puedan llegar a culpabilizarse por ello.
Número 1. Diálogo
Habla con tus hij@s, son pequeños pero no estúpidos, y si lo haces de manera tranquila y pausada, intentando razonar, se darán cuenta de que la separación es la mejor solución para tod@s.
Número 2. Sinceridad
No mientas a tus hij@s y se te preguntan diles la verdad o ellos se darán cuenta y no sabrán lo que realmente más, lo que les provocará mayores inseguridades, dudas, frustración y culpa.
Número 3. Apoyo
Muestra interés por los sentimientos de tu hij@ e invítale a compartirlos contigo, haz que se abra y sincere contigo, deja que se desahogue y exprese sus sentimientos ante esta nueva e incómoda situación.
Número 4. Comunicación y respeto
Evita las situaciones conflictivas ante la presencia de tu hijo o hija, es uno de los mayores errores que se pueden cometer y además favorece la sensación de culpabilidad.
Número 5. Sin chantajes emocionales
No cargues contra el otro miembro de la relación en presencia de tu hijo o hija, ni los uses como mediadores de tu relación. Ell@s no tienen la culpa de lo que haya podido suceder en el seno de la pareja.
Número 6. Nuevas relaciones
A la hora de tener una nueva pareja, no debes presentarla a tus niñ@s hasta saber que tiene futuro. Si consideras que la relación no irá más allá de unas cuantas citas, evítalo. En el caso de que sea tu expareja la que tiene una nueva relación, respétala, no intentes poner a tu hij@ en contra.