Cuidar de nuestra salud dental es algo que tenemos que tener siempre presente a lo largo de nuestras vidas, pero máxime cuando se es muy joven y hay que empezar a evitar problemas como lo son la caries. Desde luego, si cuando somos jóvenes empezamos a cuidar de nuestra boca conseguimos adquirir unos hábitos de higiene bucal que son muy importantes y que, desde luego, nos van a proporcionar grandes ventajas a lo largo de toda nuestra vida. Y eso es realmente importante teniendo en cuenta la gente que lo pasa mal en la actualidad a causa de dolores de muelas constantes.
Por desgracia, en España asistimos a una debacle del cuidado dental entre nuestra población. A pesar de que somos uno de los países que cuenta con una mayor cantidad de profesionales en este campo, son muchas las personas que padecen algún tipo de problema bucodental. De hecho, el nuestro es el país más peligroso de toda la Unión Europea en este sentido y es por eso por lo que es necesario un cambio radical y que, además, sea rápido. Y es que los datos no hacen sino hablar mal de nuestro país de puertas hacia afuera.
Observemos cuáles son los principales problemas de los niños españoles en lo que tiene que ver con su salud bucodental. Este asunto fue estudiado por el portal web Guía Infantil, que manifestaba que el primero se esos problemas no era otro que la caries, que es justo el que nos esperábamos encontrar en este sentido. El segundo es el de los dientes apiñados, algo que no cabe la menor duda que ha sido, de toda la vida, un problema de calado para los más pequeños. Desde luego, no es raro encontrarse a un niño con este problema. Ni ahora ni en ningún otro momento.
Pero lo que realmente nos ha sorprendido es un dato que fue revelado por el portal web Infosalus y que hacía referencia al número total de dientes de leche que están afectados, en España, por una cuestión como lo es la caries. Esta cifra es de 7 millones, un dato que pone de manifiesto que tenemos un problema realmente grande y que tenemos que poner todos los medios que conozcamos al alcance de la gente para que puedan tratar de resolver esos problemas bucales que afectan a los niños de su familia.
Los niños son uno de los grupos de población más afectados por todo tipo de problemas bucodentales y está claro que tenemos que poner toda la carne en el asador para tratar de revertir los datos. En la clínica dental Espai Dental Olve nos han comentado que ha crecido de una manera considerable el número de niños que necesitan acudir al dentista a causa de algún problema dental. Por una parte, no es malo que los pequeños empiecen a perderle el miedo al dentista. Por la otra, claro está, es evidente que no nos podemos alegrar de que esos niños sufran las consecuencias de no cuidar de un modo correcto de sus piezas dentales.
El exceso de azúcar, el detonante del problema
Son muchas las cosas que hacen que sean los niños quienes más sufren en su boca en los momentos en los que estamos. Una de las más destacadas es la que tiene que ver con el excesivo consumo de azúcar, sobre todo al consumir alimentos como lo son las chucherías, que son las que más afectan a nuestra boca y que generan un perjuicio bastante importante. El hecho de que cada vez se empiece a consumir una bebida como lo es la Coca Cola también tiene mucho que ver con este asunto.
Es evidente que de la combinación entre un menor consumo de estos productos y un mayor cuidado dental depende que los problemas dentales de los más pequeños se reduzcan de una manera considerable. Para ello estamos los padres y madres, que tenemos que hacer todo lo posible por tratar de que los menores adquieran hábitos saludables en este sentido y que no pongan en riesgo algo tan sagrado como lo es la salud dental, que cuando nos falta la verdad es que nos arruina la vida en todos los sentidos.
La verdad es que solo podemos ir a mejor en un país como el nuestro. Los datos que nos deja España en lo que tiene que ver con el volumen de problemas dentales entre los más pequeños es realmente preocupante y hay que ponerle coto a la máxima brevedad posible. Y es que no es para menos. Si no es así, los datos van a seguir siendo malos por los siglos de los siglos. Que haya una generación que pelee por cambiar las cosas es una cuestión importante para tratar de que las generaciones siguientes también lo hagan. Sería el punto de inflexión necesario para tratar de paliar este problema.