Psicólogos y psiquiatras se han puesto por fin de acuerdo sobre los beneficios que puede aportarle a un niño tener una mascota en casa. Parece los estudios abogan por el beneficio más que por las contraindicaciones que puede tener el hecho de convivir con un animal en casa, contraindicaciones como pueden ser las alergias por ejemplo. El psiquiatra Dr. Hernández en Alicante está totalmente a favor de esto y asegura que los beneficios son tantos que si hay posibilidad de ello no ve motivo por el que la familia no debiera tener dicha mascota.
Cuidar de un perrito no sólo crea un vínculo especial sino que también favorece el desarrollo emocional en el pequeño. Un estudio muy actual ha demostrado que el estrés que sufren los pequeños habitualmente por culpa de la escuela y problemas familiares se ve reducido gracias a la convivencia con estos animales. Reducen el estrés y fomentan el respeto en general por los seres vivos, algo que muchos niños deberían aprender visto lo visto.
Desde el punto de vita de la salud mental, los animales domésticos son muchas veces mejores confidentes e impulsores de la autoestima en los niños que los propios seres humanos. Ejemplo de ellos es la terapia asistida con perros por ejemplo, gracias a la cual muchos niños con problemas de TDAH (Trastorno del déficit de atención e hiperactividad) y niños con TAE (trastornos del espectro autista) se han visto beneficiados notablemente, aumenta cada año en adeptos y jamás ha disminuido según las estadísticas nacionales.
El autismo es una enfermedad aislante que afecta a uno de cada 150 escolares en España y los canes logran que el pequeño se relacione con su entorno y sonría, un milagro para las familias.
El perro se convierte en el mejor amigo del niño y en compañero inseparable del mismo. Ver sonreír a un niño no es nada de otro mundo por mucho que nos guste pero para un niño autista se convierte en un mundo. Los niños que sufren este trastorno son niños que se aíslan en sí mismos y que no comparten sentimientos con su entorno por lo que sacarles una sonrisa, aunque sea a través de un perrito, es un logro impresionante.
Pero veamos aún más beneficios porque el perro también ayuda al niño autista en el colegio porque consigue darle tranquilidad y reducen el estrés que sienten en las aulas, un entorno hostil para muchos de ellos, y esa relajación consigue que se relacionen más con su entorno y sigan el ritmo de la clase, algo realmente complicado para ellos.
Personalmente yo soy de las que opina que tener un animal en casa trae más beneficios que perjuicios y ahora que los doctores se han puesto de acuerdo me siento hasta orgullosa por ello así que siempre aconsejaré tener una pequeña mascota en casa para el disfrute de la familia y por el bien de los niños.