Como bien sabemos, es importante introducir a nuestros hijos en el ritual de limpieza bucal desde bien pequeños. Para ellos mismo supone una rutina pero en cuanto se vuelve aburrida se convierte en una obligación, por lo que debemos nosotros como padres intentar que esto no ocurra para que adquieran el hábito desde temprana edad.
Así, en este artículo te damos varios trucos para que tus hijos se laven los dientes de forma divertida y no les suponga un gran esfuerzo.
- Compra un cepillo divertido o deja que elijan ellos
Si la forma y color del cepillo de dientes les gusta, tendrán más interés en llevar a cabo este nuevo hábito. Prueba a comprarles uno de sus dibujos animados, personajes favoritos o de un color que les encante.
Pero también a la hora de elegir el cepillo hay que tener en cuenta el tamaño y la suavidad de las cerdas.
Y hay que tener en cuenta que el cepillo se debe cambiar. “El cepillo de dientes se tiene que cambiar cada 3 meses por uno nuevo, independientemente de la edad de la persona que vaya a usarlo. Porque tras el uso del cepillo se debilitan las cerdas y el cepillado ya no se realiza con un resultado óptimo”, explican desde Clínica Dental Gaudí, centro odontológico de referencia en la ciudad de Terrassa.
- Una pasta de un sabor agradable
Escoger el dentífrico adecuado depende de varios factores. Según qué tipo de dientes y situación se tendrá que usar un dentífrico y otro. Para ello consulta a un dentista profesional y que te aconseje cual es la mejor opción según la salud bucodental de tus hijos.
Pero intenta siempre elegir un sabor que les guste y que no lleve muchos azúcares ni sea muy dulce.
- Hora de cepillarse los dientes de familia
Cepillarse los dientes todos juntos en familia es muy buena idea para darles ejemplo y que vean cómo se hace correctamente. Es el momento perfecto para indicarles qué cantidad de pasta de dientes se debe usar, cómo mover el cepillo, cómo llegar a los espacios más difíciles, y que puedan imitarlo. Además, podrás corregirles si algo no lo hacen bien, pero siempre de manera correcta y a través del juego.
- Utilizar un reloj de arena o cronómetro
Lo ideal es que el tiempo del cepillado ronde los 2 o 3 minutos. Convierte esto en un juego o una carrera de quien se cepille todo bien antes de que acabe el tiempo, gana. Para ello puedes usar un reloj de arena o un cronómetro y así hacerlo más divertido. O simplemente cantar una canción de esa duración y podrán parar de cepillarse los dientes cuando termine.
- Ayúdate de algún juego o pon música
Los juegos o la música son el recurso perfecto para hacer que se motiven. Así conseguirás, que sin que se den cuenta, se distraigan y vean el cepillado, como una actividad positiva y divertida. Puedes buscar alguna canción o video sobre el tema y enseñárselos para que se lo aprendan y quieran imitarlo cada vez que llegue el momento. En YouTube hay multitud de vídeos y canciones perfectos para el cepillado de dientes como ‘Canción cepilla tus dientes por Blippi’ que tiene más de 90 millones de reproducciones.
- Usa revelador de placa
El revelador de placa es un producto que cuando se aplica, se colorea la placa bacteriana. De este modo, podemos ver qué zonas de la boca tienen más sucias y en las que el cepillado no se ha realizado correctamente. Además, es una idea muy útil y divertida ya que el hecho de los niños se vean con la boca pintada les vuelve locos. Así podrás enseñarles que aunque no se vea sus dientes están sucios y deben cepillarlos a diario.
- Felicita y da recompensas
Es vital que después de cada sesión halagues por el buen resultado y los felicites. Todos los niños necesitan la aprobación y admiración de sus padres. También, de manera ocasional, se les puede premiar con algún detalle, siempre y cuando no sea nada de bollería ni caramelos. Es una buena forma de que sigan haciéndolo.
- Explícales la importancia del cepillado dental
Para que los niños se cepillen los dientes hay que dejarles muy claro la importancia que tiene tener este hábito diariamente en sus vidas, mostrándole los beneficios y consecuencias de no hacerlo.
Según la edad de los pequeños habrá que explicarlo de una manera u otra, siempre acorde a su edad. Procura que sea sencillo de entender. Incluso hay libros infantiles perfectos para explicarles esta tarea. Podrás encontrarlos fácilmente en cualquier librería online.
Conclusión
En definitiva, si quieres que tus hijos adquieran el hábito de cepillarse los dientes tras cada comida tendrás que esforzarte y enseñarles que es una tarea muy importante para su salud.
Pero con estos trucos te resultará una tarea más sencilla, aunque al principio te cueste un poco hacer que se convierta en un hábito. No te rindas, pues si tiras la toalla es probable que en poco tiempo aparezcan las primeras consecuencias de falta del cepillado como alguna caries, sarro o mal aliento.