Todos hemos oído alguna vez eso de que los niños son esponjas, y es verdad, pero parece que la gran mayoría de la sociedad cree que empiezan a ser esponjas a partir de los 4 o 5 años, craso error porque lo son desde que nacen.
Cuando abren los ojos por primera vez empiezan a aprender ya descubrir, primero su propio cuerpo porque no son conscientes de él, lo empiezan a descubrir poco a poco, cómo moverse, como manejarse con sus propias extremidades: al principio, todos sus movimientos son involuntarios. Y a partir de ahí todo en el entorno que les rodea, en su contexto, es aprendizaje, lo queramos o no. Cualquier persona que forma parte de su entorno es un agente educador y debemos tenerlo siempre presente.
Muchos padres optan por dejar sus trabajos, pedir excedencias o, simplemente, no buscar un nuevo empleo para poder quedarse con sus hijos hasta los 4 años, edad a la que entran en la primaria, en el colegio. Esta opción es maravillosa desde el punto de vista de que el niño se tiene que criar con la familia, aprender de ellos y ser cuidado por sus padres y madres pero se nos olvida algo en toda esta ecuación: nosotros no somos especialistas. El niño y la niña, desde edades bien tempranas, necesitan estímulos que ayuden a desarrollar sus capacidades intelectuales, motrices, etc. y nosotros, por muy buena voluntad que tengamos, no somos educadores y no sabemos cómo hacerlo correctamente. En ocasiones, ni siquiera contamos con el tiempo necesario para hacerlo así que es prácticamente imposible.
Mi recomendación
Una de las mejores escuelas infantiles de Vigo, localidad en la que resido, es A Camelia, la recomiendo totalmente. Y os dejéis amedrentar por esos padres que dicen que es una salvajada dejar al bebé con menos de un año en una escuela infantil porque allí están preparados para darles los cuidados básicos y para ayudarles a desarrollarse, nada más y nada menos. Además, sus instalaciones son una auténtica maravilla sensorial para los niños y niñas de esas edades.
No puedo hablar de otras comunidades porque no las conozco pero si puedo daros algunos parámetros de búsqueda para que los podáis tener en cuenta a la hora de buscar en otras ciudades la mejor escuela infantil para vuestros hijos.
- Olvídate de las guarderías, kindergarten o jardines de infancia. Busca sólo “Escuelas Infantiles”.
- Asegúrate de que todos y cada uno de los tutores de las aulas de infantil tienen el título correspondiente.
- Pide que te enseñen el proyecto educativo, más que para leértelo para asegurarte de lo que tienen.
- Pregunta si, además de desarrollar actividades de aprendizaje, realizan actividades para despertar la creatividad del niño. Esto es fundamental.
- Y, sobre todo, pregunta por el nutricionista que elabora los menús si lo vas a dejar a comer, es muy importante que el niño o niña tenga todos los nutrientes diarios necesarios para desarrollarse con normalidad.