Llega la navidad y todos nos ponemos como loco a comprar y a regalar cosas inútiles a la mayoría de la gente a la que queremos porque queremos quedar bien y nos hace ilusión darles un detalle de navidad pero, la realidad, es que hay cosas que nos vienen mejor o en lo que nos gustaría más invertir ese dinero. Nosotros tomaros una decisión al respecto hace 4 años y este 2016 haremos realidad nuestro sueño instalando una piscina de fibra en nuestro jardín.
Nosotros somos una familia de cuatro, los papás, y dos enanos que nos alegran la vida todos los días y aunque para los peques siempre cae algo en Navidad por parte de sus abuelos, llegamos hace 4 años al siguiente acuerdo entre nosotros y con la familia: como lo que más ilusión nos hacía era instalar una piscina en el jardín y no había manera de ahorrar decidimos meter los 300 euros que nos solíamos gastar anualmente cada navidad en una cuenta de ahorro. A ese dinero le hemos añadido lo sobrante de las pagas extra, algún que otro ahorro en cumpleaños y hasta mi hijo de 10 años metió los 200 euros que ahorro de los regalos de su comunión el año pasado. Ahora, tras cuatro años y algún que otro sacrificio, vamos a poder instalar nuestra piscina soñada.
Nos hemos puesto en contacto con DTP y nos han hecho dado un presupuesto que pondremos en marcha en marzo para que cuando llegue el verano esté todo listo para el chapuzón.
El motivo para decantarnos por las piscinas de fibra es el siguiente. Es de rápida instalación y fácil mantenimiento, lo que supone un ahorro económico y tiene ventajas muy interesantes como que se fabrican en una sola pieza que se recubre con fibra de vidrio, un sistema flexible, duradero y fácil de mantener. Son resistentes a las agresiones atmosféricas debido a que son fabricadas con una mezcla equilibrada de resina de poliéster y fibra de vidrio de alta resistencia. Al ser confeccionados en una sola pieza, son más estancos y no presentan riesgos de pérdidas de agua por filtraciones.
Ahora bien, si queréis instalar una piscina como vamos a hacer nosotros tenéis que hacer las cosas bien. Informaos del papeleo que hay que hacer, pagar las tasas de construcción al ayuntamiento y no escatiméis en gastos tontos porque luego todo eso os puede salir muy caro. Este 2015 el catastro ha descubierto una mil piscinas no declaradas en Galicia. ¿Sabéis lo que supone esto? Supone mil multas de variable cantidad pero muy notable a mil familias sólo en Galicia, imaginaos en el país entero lo que puede ser eso.
Si os han aconsejado hacerla ilegal par ano pagar los impuestos pertinentes y las tasas asegurándoos que no pasa nada no hagáis caso, haced las cosas bien, ese es mi consejo, porque si os cazan vais a llorar, y mucho.